Revista Pelícano Vol. 2. Las formas de la memoria
ISSN 2469-0775 - pelicano.ucc.edu.ar – Pp. 122-145
Agosto 2016 – Córdoba
Eminencia, Excelencia…” (cfrr. Pikaza y
Antunes da Silva, 2015, p.21)
Este “Pacto” fue precursor de otro
documento colectivo firmado el 15 de agosto
de 1967. El Manifiesto de 18 obispos del Tercer
Mundo
7
, encabezado por el Arzobispo brasileño
Hélder Cámara, tuvo repercusión mundial,
especialmente en nuestro país porque dio
origen en 1968 a lo que luego se llamó
Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo.
Los cristianos – dijeron los obispos en ese
Manifiesto – tienen el deber de mostrar
que el verdadero socialismo es el
cristianismo integralmente vivido, en el
justo reparto de los bienes y la igualdad
fundamental de todos. Lejos de
contrariarse con él, sepamos adherirlo con
alegría, como a una forma de vida social
mejor adaptada a nuestro tiempo y más
conforme con el espíritu del Evangelio.
Así evitaremos que algunos confundan
Dios y la religión con los opresores del
mundo de los pobres y de los
trabajadores, que son, en efecto el
feudalismo, el capitalismo y el
imperialismo. (AAVV, 1968, p. 17).
8
Al clausurar la última sesión del Concilio, el
7 de diciembre de 1965, el Papa Pablo VI dijo:
“La Iglesia se ha declarado en cierto modo la
sirvienta de la humanidad” (Paulo VI, 1966, p.
829). La propuesta era cambiar la ubicación
social de la Iglesia, más allá de que en los
documentos conciliares quedaron expresadas
las diversas perspectivas predominantes, sin que
los pobres lograran el lugar central asignado en
el mensaje evangélico.
9
7El teólogo y filósofo José Pablo Martín relata: “En
septiembre de 1973 le hice una entrevista a Angelelli; me
contó que él había pasado un mal trago con la redacción
de ese manifiesto. (…) Angelelli me decía que a él le
hubiera gustado otro tono, participar en la redacción y,
sobre todo, que se extendiera el número de los firmantes
que podían haber sido 70, y hasta más de 100, con un
poco de tiempo.” cfr. Op. Cit. p.397.
8Dicho manifiesto fue publicado en el semanario francés
Temoignage Chrétien, el 31/8/67, Pf. 14, b. (Traducido por
el CIDOC – Centro Intercultural de Información, Doc.
67/35, Cuernavaca, México, 1967).
9El teólogo e historiador brasilero José Oscar Beozzo
afirma que los padres conciliares “al plantear la
modernidad no diferenciaron entre su cara atractiva de
ciencia y técnica,…con una modernidad que representaba
Para el obispo Angelelli las definiciones
fueron claras. Antes de partir de Roma escribió
sus extensas reflexiones que cruzó como
reservadas:
La elaboración conciliar nos lleva a una
Iglesia, apostólica, misionera, universal,
abierta, santa, evangélica, pobre, signo,
rostro, sacramento del Dios escondido; a
una Iglesia que siendo de Hoy quiere y siente
la necesidad de dialogar y comprender al
hombre actual; que no está puesta para
condenar, sino para sanar y salvar; que
quienes están constituidos en autoridad en el
Pueblo de Dios, son servidores…si la
autoridad es esencial en la Iglesia no es fin
en sí misma sino servicio de la Ecclesia para
que todos conozcan al Padre por el Hijo en
el Espíritu Santo (Angelelli, 1996).
Como obispo auxiliar de Córdoba, desde
fines de 1960, Mons. Angelelli impregnó sus
opciones en la pastoral arquidiocesana.
Intervino apoyando conflictos obreros y
convocó a la solidaridad con los pobres en la
crisis económico-social de fines de 1963
(Angelelli, 1963). Este accionar y su activa
propagación de la renovación del Concilio
Ecuménico Vaticano II (1962-1965),
10
apoyando al clero que reclamaba cambios, le
provocó la adversa reacción del tradicionalismo
católico de Córdoba, que atrajo la intervención
de la Nunciatura Apostólica en 1964. Mons.
Angelelli quedó “desorientado y hasta
escandalizado, al ver que se ha impostado toda
una reunión del clero, sobre una realidad
inexistente, cual es la rebeldía” al Arzobispo,
mientras en privado el Nuncio le pedía que
tratara de “calmar al clero durante cinco meses,
porque la Santa Sede necesita ese tiempo para
solucionar el problema. […] Me cuesta ver un
proceder evangélico” (cfrr. Angelelli, 1964),
concluía el informe del obispo auxiliar que
quedó acusado arbitrariamente de rebelde,
colonización, rapiña, guerras”. Revista Vida Nueva, 9 de
marzo de 2012, España. Recuperado el 1 de mayo de
2016 de http://www.vidanueva.es/2012/03/09/jose-
oscar-beozzo-teologo-brasileno-tenemos-que-alentar-y-
no-matar-la-profecia-dentro-de-la-iglesia/
10
Enrique Angelelli participó de la primera sesión del
Concilio en 1962. Y de la tercera (1964) y cuarta (1965).
Durante el desarrollo de la segunda, en 1963, quedó a
cargo de la Arquidiócesis de Córdoba.
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