Análisis estadístico:
Se realizó estadística descriptiva.
Resultados:
Se describieron 8 pacientes con EA. Cuatro de
sexo femenino (50%) y cuatro masculino (50%).
La edad media del diagnóstico fue de 7.6 años con
un rango de 2 a 14 años. El tiempo de seguimiento
medio fue de 23.8 meses con un rango de 14 a 48
meses.
La demora en el diagnóstico varió entre 6 y 50 días,
con un promedio de 26 días.
Siete presentaron EI definitiva, 6 EI Anti-NMDAr
y uno EI de Hashimoto. El paciente restante, los
títulos de anticuerpos en LCR fueron negativos y
se define como EA posible, por la clínica.
Dentro de los 15 días de evolución, los pacientes
presentaron convulsiones, predominando tónico
clónicas generalizadas en 5 pacientes (62%)
asociadas a cambios conductuales y movimientos
anormales, el más frecuente, disquinesias oro
faciales en tres pacientes (38%).
En todos los casos se realizó tratamiento de
primera línea con cortico terapia y
gammaglobulina EV. Cuatro, por falta de mejoría
clínica requirieron plasmaféresis. En dos pacientes
se realizó tratamiento de segunda línea con
rituximab y en uno de ellos además
ciclofosfamida.
La resonancia magnética anormal se informó en
dos pacientes (25%), predominando lesiones
hiperintensas en FLAIR en regiones
hipocámpicas. El patrón Deltha Brush se observó
en un paciente (12%).
En 6 de los 8 pacientes se observó remisión
completa (75%). Los pacientes que presentaron
secuelas, el primer paciente presentó hemiplejía
distónica-disquinética con mejoría en la respuesta
a tratamiento de segunda línea y rehabilitación y el
segundo paciente epilepsia refractaria.
Ninguno de los pacientes presentó asociación a
tumores ocultos, ni episodios previos de
Encefalitis.
Conclusión:
Desde su descripción a la fecha los reportes de EA
han ido en aumento. Esta patología de presentación
subaguda puede responder a distintas etiologías y
presentarse también como un síndrome para
neoplásico. El alto índice de sospecha puede
orientar de manera adecuada los métodos
complementarios y acelerar el proceso
diagnóstico. La presencia de convulsiones
asociadas a cambios cognitivos y conductuales
debe elevar el índice de sospecha y orientar a su
estudio específico. El inicio precoz del tratamiento
se relaciona de manera directa con el pronóstico y
evolución, ya que el 80%de los pacientes presentan
una buena respuesta con recuperación total o casi
total de los síntomas.
Introduction:
Since the first description, immune-mediated
encephalitis (EI), among them, against the anti-N-
Methyl-D-Aspartate (NMDAr) receptor has been
increasingly recognized, being considered the
most frequent immunomediated inflammatory
process after Encephalomyelitis acute
disseminated.
Objective:
To describe trends in pediatric patients diagnosed
with el.
Materials and methods:
Retrospective, observational clinical histories
review was performed in the last 4 years. Eight
patients with EI described. The mean age at
diagnosis was 7.6 years. The delay in the
diagnostic ranged from 6 to 65 days, with 26
days’ average. Seven presented final EI, EI Anti-
NMDA el 6 and one Hashimoto el.
Results:
Within 15 days of evolution, patients had seizures
associated with behavioral changes and abnormal
movements, the most frequent orofacial
dyskinesias in 38%. In all cases first - line
treatment was performed. Four required smafé pla
resist. In three patients with second line treatment
Rituximab was performed and one
cyclophosphamide. The Deltha Brush Pattern was
observed in a patient.
In 6 of the 8 patient’s complete remission (75%)
was observed. There was no patient in association
with occult tumors. Time tracking in an average of
2 2.8 months with a range of 4-48 months.
Conclusions:
Since its description to date, EI reports have been
increasing. The presence of seizures associated
with cognitive and behavioral changes should raise
the index of suspicion and their specific study
guide. Early initiation of treatment is associated
directly with prognosis and evolution.